He visto millones de fotos de bodas campestres en blogs españoles pero sobre todo americanos. Es verdad que son una muy buena fuente de inspiración pero no dejan de crearme cierta confusión. Celebraciones en medio de campos de trigo en los que no se ve ni un ápice de civilización donde poder enchufar un horno, un armario caliente o una freidora. Animales merodeando a sus anchas pero atentos a la ceremonia al mismo tiempo, y cuando digo animales, no me refiero a hormigas. Novios que parecen sacados de la última portada de Elle. Sí, todos los novios son guapísimos, pero tantoooo?!

Encontrar el equilibrio entre estas maravillosas fotos y la boda que queréis vosotros (previo presupuesto), la que quieren vuestros padres y la que esperan tus invitados, no es tarea fácil, pero si lo conseguís, el resultado puede ser muy bueno y además, está de moda.

Últimamente me he colado en  alguna boda campestre, por supuesto todas en el campo pero además suelen seguir un patrón bastante parecido. Decoración con flores silvestres: Lavanda, Margaritas, Astromelias,  Paniculata… agrupadas en botellas, cuencos de cristal, cajas de madera o incluso panes. Sí, la madera cobra vital importancia en todas sus vertientes y cómo no!, los árboles! cualquiera que se tercie a ser decorado bien con  velas, regalos, bombillas, guirnaldas…

En la ceremonia civil o religiosa no pueden faltar  las balas de paja, forradas con telas estampadas y diferentes, con almohadones o sin ellos, todo se mezcla,  nada va conjuntado, la idea es romper.

En cuanto a la gastronomía, vuelven  los buffets de toda la vida con menús más desenfadados pero no por ello menos suculentos. Encontramos platos de cuchara como alubias con perdiz, buffets de carrilleras con guarniciones servidas en cazuelas de barro… Me encantan los panes de sabores variados como aceituna, nueces, queso, tomate, centeno…todos ellos presentados en cestos de paja o cajas de madera y para terminar, torrijas con helado, tartas de arándanos, bizcocho de calabaza con chocolate y fruta fresca.

¿El resultado? es como si lo sencillo hubiera recobrado importancia. Dejamos de lado la sofisticación, nos saltamos un poco el protocolo y disfrutamos hasta el final en un ambiente de cuento.

Nota: todas las fotos pertencen a eventos realizados por Catering Cinco